Tokaji Furmint Szent Tamás 2005 de István Szepsy

En una entrada anterior os explicaba la metamorfosis que había afectado el mundo de vino de Tokaj con la caída del antiguo régimen húngaro a finales de la década de los 80's del siglo XX, y la entrada de inversiones extranjeras. Seguramente en esa entrada me centré sobremanera en las empresas internacionales que se habían establecido en la zona y había dejado de lado los pequeños productores autóctonos que llevaban generaciones produciendo vinos de calidad en la región y con el aperturismo empresarial habían podido resurgir con brillantez y destacar, partiendo de la base del estancamiento productivo comunista, en lo que se conoce cómo el renacimiento del Tokaj.

Precisamente de una de las familias históricas de productores, los Szepsy, que trabajaban la vid desde el siglo XVI y a quienes se les atribuye la creación del término Tokaji Aszú, surge una de las figuras más renovadores del panorama vinícola húngaro, István Szepsy, cuyo trabajo se venía realizando desde 1971 en la bodega estatal, pero que no pudo comercializar su propio vino hasta el año 1989. Una renovación por parte del padre del Tokaj moderno tanto en la viticultura, intentando reducir los rendimientos derivados de las hiperproducciones de la época colectivista y aumentar la calidad y el tamaño del racimo, como en la vinificación en búsqueda de un perfil más frutal, menos oxidativo, dónde la pureza y la frescura sea su seña de identidad, tanto para sus vinos dulces cómo para sus secos.

Para ello explota 63 hectáreas de terrenos de las cuales 46 ha. están dedicadas al cultivo de la vid, intentando replanta viñedos en las laderas en forma de V del macizo volcánico de Zemplén, dónde se encuentran los mejores viñedos de la región, con nombres a recordar cómo Király, Danczka, Nyulászó, Úrágya o Betsek, por mentar algunos.

Precisamente otro de los mejores viñedos es el pago Szent Tamás situado en la localidad de Mád, centro histórico de comercialización de la zona. De ese viñedo el maestro István Szepsy posee 10,1 hectáreas productivas, ocupando la Furmint el 70% de su producción. Dicho viñedo de primera categoría sirve para elaborar tanto cuvées dulces cómo este vino blanco seco (száraz fehér bor) y muy recientemente disfrutamos una botella de su cuvée seca más prestigiosa, de la añada 2005 y resultó tanto por precisión cómo por intensidad una bocanada de aire fresco. Lastimosamente se trata de un productor difícil de encontrar, ya que salvo contadas excepciones, cómo esta botella consumida en Monvínic, su introducción comercial en España es más bien escasa.

1 comentario :

  1. En el restaurante Gresca de Barcelona se puede encontrar el Tokaji Furmint Sec 2006 del maestro Szepsy.

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