Albariño Do Ferreiro 2001

Recordaba con cariño que en la pasada Vitis Vinífera, tras degustar unos cuantos vinos del Levante español, un duro ejercicio de cata por la carga tánica y lo crudos que estaban los vinos, ya que catamos 2004 y 2005, me pasé por el stand de Gerardo Méndez, dónde servía su básico del 2006. Su acidez y estructura alivió mis cansadas encías, pero a la vez me recordó el buen hacer de este productor pontevedrés.

Su albariño, año tras año, se sitúa entre los mejores y más consistes vinos de las Rías Baixas gallegas. Pues bien, gracias a la inestimable bodega que tienen los chicos de Malvasia Vins, en el centro de Palma, pude disfrutar de este vino, con cierta evolución en botella. Y es que no se estila guardar estos vinos.

Más de cinco hectáreas cultivadas en altas pérgolas, con casi dos metros de altura, de suelos de buen drenaje, dónde las tierras oscuras de las laderas del valle de Salnés, a orillas del Umia, son profundizadas por las raíces, aportando al vino su carácter. El proceso de vinificación es preciso, posterior a una selección en el mismo viñedo. Los racimos recogidos según su estado de maduración se despalillan y se aplica al mosto resultante del prensado una maceración pelicular de entre 24 y 48 horas, se desfanga y fermenta sobre sus propias lías, en depósitos de acero inoxidable, a temperatura controlada y de forma prolongada. Tras este proceso se cría en los mismos depósitos durante cuatro meses. La fecha de embotellado, junto a la añada, se indica en la contraetiqueta y la botella en cuestión se embotelló un magnífico 23 de mayo del 2002.

En visual se muestra algo subido, pero sigue brillante y limpio, dando sensación vital. Denso en el balanceo, su nariz se muestra maduramente frutal, dónde las sensaciones de albaricoque brillan en un aromático conjunto, dónde también sobresalen ligeros toques especiados y algunas notas estivales de paja seca y heno. En boca se muestra algo más fatigado, con una sensación ligeramente amargante. Buena acidez, su estructura se ha mantenido y ha sabido ganar en profundidad. Sin duda, un ejemplo a seguir, 90 PF.

Se pueden encontrar los vinos de Gerardo Méndez en bastantes tiendas de Barcelona, ya que Cuvee3000 es su distribuidora, pero para encontrar el Cepas Vellas, la cuvée más prestigiosa de la bodega, la tarea se convierte en algo más complicado. Si os cruzáis con una botella, sin duda, comprad.

5 comentarios :

  1. Probablemente mi productor favorito en Rías Baixas. Una suerte que hayas podido probar una añada como 2001, que no encuentra fácil en el mercado a estas alturas.

    Por cierto que mi último post también es de un albariño, de una bodega nueva para mí: Zárate. Exquisito.

    Un saludo

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  2. También desconocía la existencia de esta bodega, hasta que Pisto me dió luz. Aúnque aún no he probado ni el Zárate básico ni el cuvée Palomar y eso que Vilaviniteca los trae a Barcelona. De los otros vinos, no sabía de su existencia.

    Saludos.

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  3. Pues Zárate no lo conocía tampoco, hasta que hace unos pocos días, oí por la radio en su espacio habitual de la Forquilla (tenedor) de Catalunya Ràdio nombrar este productor, por parte de Quim Vila, este destacaba a parte de sus vinos tranquilos, su orujo. Alguna opinión al respecto?

    Saludos.

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  4. Tocayo, no soy consumidor habitual de orujos, más bien los evito, como tampoco de bebidas destiladas, por lo que no te voy a ajudar al respecto.

    ¡Qué disfrutes de Santander!

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  5. Pues a ver si el amigo sobrevino conoce este orujo, en su blog aparece excelente información sobre la bodega y sus vinos. Tampoco soy gran amante de los destilados, pero me llamó la atención el comentario del amigo QV, y ante cualquier producto de calidad especial, siempre soy receptivo :))

    Saludos.

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