Touraine Rosé 2005 de Domaine de la Garrelière

Recientemente el amigo Encantadísimo nos habló sobre sus rosados favoritos, y recordé que debía estar apunto de llegar la nueva añada de uno de los rosados más personales que he tenido la suerte de probar últimamente. Esta pequeña explotación situada en la Turena francesa (Touraine) es propiedad de François Plouzeau, quien se hizo cargo de la bodega en 1985, tras los pasos de su padre Pierre, quién había iniciado el negocio en 1973, llevando a cabo un proceso de reestructuración e incorporando nuevas castas al viñedo.

Desde 1993, otro biodinámico a incluir en la lista (cada día más extensa). Posee 20 hectáreas de viñedos en lo que fue una antigua propiedad de Jean-Armand du Plessis, duque de Richelieu cerca de Poitou, en una colina a 130 metros de altura, con una exposición sudoeste y composición de suelos arenosos, sílex y tierras argilo-calcarias.

Cabernet Franc y Cabernet Sauvignon a partes iguales, vendimiando manualmente la Cabernet Franc, y a maquina la Cabernet Sauvignon, prensando durante 4 horas, sin que haya maceración ni contacto con los hollejos, y finalizando el proceso, criándose en tinas de acero inoxidable durante 4 semanas, sin que se realice la fermentación maloláctica.

Durante la cata muestra una preciosa visual cobriza con algunos destellos asalmonados, limpio, transparente y brillante. En nariz es muy personal, armónico y con buena frutosidad. Aires más ligeros que los del 2004, pero con buenos recuerdos de sandía, grosellas y hierbabuena, con ligeros toques de paja seca. En boca se muestra algo ligero, correctamente goloso, con unas puntas alcohólicas aún por afinar, sin estridencias y con un final muy agradable,ligeramente amargo, recuerdo de mandarina. 85 PF.

Los vinos de Domaine de la Garrelière se pueden encontrar en Lavinia y este rosado costó 6,50 euros.

1 comentario :

  1. Interesantisímo vino el 2004, al cual le dediqué un post. Ligero, muy agradable y con una sorprendente persistencia. Tengo que ir a por el 2005.

    ResponderEliminar